Gran legado cultural

China es un país de contrastes, por su multiculturalidad y riqueza histórica. Este país oriental cuenta con una gran variedad de ferias culturales y celebraciones que se remontan a siglos. Además, es cuna de creaciones tan revolucionarias como la pólvora, que hoy en día se utiliza en los fuegos artificiales, el papel, la imprenta, la seda, la goma, el paraguas y la brújula... Otros inventos llevaron a grandes hazañas de ingeniería como el Gran Canal y la Gran Muralla China. En la antigua China también se trabajaba en cultivos como el arroz, el trigo y la soja para los cuales se inventaron herramientas que hoy perduran como la carretilla.

Paisajes sorprendentes

China posee todo tipo de paisajes espectaculares, desde desiertos a selvas, playas, montañas y praderas. Descubre las Montañas de Zhangjiajie, las montañas flotantes Hallelujah de la película Avatar, la Cueva de la Flauta de Caña o los arrozales de Guilin, con extravagantes formas calizas y adornadas con luces de colores o el paisaje atravesado por la Gran Muralla que cambia de color con las diferentes estaciones del año.

Ciudades Modernas y Patrimonio Mundial

China es la segunda economía más grande del mundo y como tal ha desarrollado grandes ciudades: Beijing, Shanghai, Guangzhou, Shenzhen y Hong Kong destacan con sus altos rascacielos y modernas infraestructuras urbanas, grandes centros comerciales que conviven con los centros históricos y los antiguos barrios, como los hutongs de Beijing. Además, China es el segundo país en el listado del Patrimonio Mundial de la UNESCO con un total de 55 sitios declarados Patrimonio Mundial.

Hogar del panda gigante

Desde el año 2016 el panda ya no está en peligro de extinción, aunque aún siguen siendo una especie vulnerable. La mayoría de los pandas que viven en estado salvaje lo hacen en la provincia de Sichuan y es ahí en Chengdu, donde se encuentra el Centro de Investigación y Conservación del Panda Gigante donde podrás descubrir más sobre estos grandes y curiosos animales.

Cuna del Kung fu

El Kung Fu fue creado por los monjes del Templo de Shaolin, situado a unos 50 km al oeste de Luoyang y rodeado de un denso bosque de bambú. Durante las dinastías Yuan y Ming, el templo de Shaolin albergaba unos 1.000 monjes, fue escuela de budismo Zen y de artes marciales. Esas artes marciales de Shaolin fueron evolucionando y perfeccionando, convirtiéndose en lo que en occidente conocemos como Kung Fu.

Compras

Ir de compras es uno de los grandes atractivos del país. En China podrás comprar gran variedad de productos artesanales, como cerámicas, trabajos en bronce o jade, grabados… pero también productos de marcas a precios muy rebajados e imitaciones de ropa, bolsos, relojes y todo tipo de complementos. Compres lo que compres te llevará tiempo ya que en muchos sitios tendrás que regatear, sobre todo si lo haces en mercadillos.

Gastronomía

La gastronomía es uno de los tesoros de la cultura china: en Xian son famosos los dumpling, buñuelos de pasta rellenos de carne de cerdo, verduras o cangrejo; en Beijing el pato laqueado, en Shanghai el Xiaolongbao, unos panecillos rellenos cocinados al vapor en cestas de bambú, los fideos de arroz en Guilin y en Hong Kong se estila una fusión oriente-occidente. En China, la vida nocturna es parte de la vida cotidiana y comer en la calle es parte de ella. No importa a qué ciudad vayas, averigua el plato popular y disfrútalo.

Medicina milenaria

Los chinos utilizaron diferentes técnicas de curación en la Dinastía Han, como la acupuntura, usada para equilibrar las fuerzas del ying y el yang. También aprendieron a examinar la salud de una persona por su pulso o por el latido del corazón. La medicina tradicional china cuenta con más de 4.000 años de antigüedad y muchas de sus técnicas se siguen usando hoy en día. En Beijing, al sur de la plaza Tiananmen se encuentra la farmacia más antigua de la medicina tradicional china, la farmacia Tong Ren Tang.