Delfos
En la antigüedad, Delfos era el centro del mundo para los griegos. Peregrinos y viajeros recorrían kilómetros para poder visitar a Pitia, la sacerdotisa más importante de la época. El Oráculo de Delfos lo constituían mujeres que pensaban que tenían poderes heredados del dios Apolo, llegaban a un estado de trance por el uso de ciertas drogas y los sacerdotes interpretaban sus consejos.